secuelas del abuso narcisista

Abuso Narcisista: sus secuelas y cómo empezar tu recuperación

Los efectos del abuso narcisista pueden variar dependiendo de diferentes factores como la duración de la relación, el tipo de vínculo o el momento de la vida en el que se ha dado el abuso, por ejemplo, no es lo mismo en la infancia que en la edad adulta. Los efectos varían de leves a graves: algunos supervivientes se recuperan, mientras que otros pueden sufrir daños de por vida. La terapia ocupa un papel fundamental en la recuperación del abuso narcisista.

Si has sufrido abuso narcisista, es muy probable que te sientas identificada con muchas de las secuelas que se nombran más abajo.

Secuelas que deja el Abuso Narcisista

Ansiedad

Todas las personas que han sufrido abuso narcisista experimentan ansiedad en mayor o menor grado. Suele haber mucho miedo a situaciones nuevas o relacioneas nuevas y una dificultad general para la relajación y el descanso.  

Depresión

La otra secuela más común en relaciones de abuso narcisista es la depresión leve (también llamada distimia) o grave. Una relación de abuso te lleva a desvalorizarte, a no tener confianza en tu misma y a sentir tristeza de una forma constante. Esa tristeza de una forma continuada, termina derivando en depresión. Muchas supervivientes se aíslan o tienen muy poco contacto social, lo que agrava la depresión. 

Estrés Post-Traumático Complejo

Como superviviente de abuso narcisista, es probable que tenga síntomas de estrés post-traumático complejo, ya que se produce una alteración del sistema nervioso. Tu cuerpo estará en alerta máxima, atento al peligro, de un modo tal que cualquier evento que te recuerde a otro evento de la relación de abuso, provocará una respuesta automática de congelación, lucha o huida. Esta respuesta en muchas ocasiones es desproporcionada a la situación que se está viviendo, pero esto es porque el cerebro se queda como en bucle, reviviendo la situación original una y otra vez.

Pérdida del sentido de uno mismo y de la autoestima

El maltrato y abuso narcisista es un comportamiento muy dañino que puede destruir tu autoestima y afectar a tu identidad, a tu sentido de ti misma. Esto ocurre tanto en el caso de que el abuso narcisista se dé en la infancia como en la edad adulta, aunque en la infancia afecta más, ya que no hay una identidad previa con la que identificarse. También es posible que tengas problemas de confianza con otras personas, tanto las cercanas a ti como los desconocidos, y que constantemente dudes de ti mismo, tanto de tus capacidades y talentos, como de tu belleza, inteligencia,… y que tengas dificultades para tomar decisiones.

Síntomas físicos

Además de lo ya comentado de la alteración del sistema nervioso, después de experimentar abuso narcisista, es posible que experimentes síntomas físicos, como dolores de cabeza, dolores de estómago o dolores en general en el cuerpo. También puedes tener dificultades para dormir o pesadillas frecuentes.

Problemas cognitivos

Los recuerdos de eventos traumáticos interfieren con la concentración y la atención, por lo que puedes tener dificultades para concentrarte en las tareas diarias, como el trabajo o las tareas domésticas o simplemente mantener la atención en una conversación con otra persona, ya sea profunda o trivial. Es muy común dedicar mucho tiempo a lo largo del día a estar disociado con los propios pensamientos, las RRSS, viendo películas o leyendo. Muchas supervivientes experimentan pensamientos de rumiación, donde se quedan enganchadas en pensamientos en bucle sobre ciertos eventos. Supone una tendencia a la obsesión y a darle vueltas interminables a eventos ya sucedidos.

Inestabilidad emocional

Después de pasar por una relación de abuso narcisista, es común o bien sufrir cambios bruscos de humor acompañados de irritabilidad, o bien en el otro extremo puede que te resulta difícil conectar con tus emociones, como un robot.

Dificultades para hacer y mantener vínculos

Una relación de maltrato o abuso narcisista, como ya hemos comentado, deja muy dañadas tu autoestima y confianza, lo que se pone en juego en las relaciones con las demás personas. Es posible que no te apetezca mucho socializar, que no sepas cómo comportarte en la compañía de otras personas o que dudes constantemente de sus verdaderas intenciones. Si ya hay un vínculo establecido, es común tener dificultades frente a situaciones como poner límites, mostrarte vulnerable, expresar tus necesidades, comprometerte o tener miedo a la intimidad.

Tendencia a complacer

En una relación de abuso narcisista, hay una tendencia a complacer al narcisista para evitar las agresiones o los conflictos. La sumisión es algo que funciona a medias con un abusador, a medias porque no para por completo el abuso pero sí lo mitiga. Por  ello, tras salir de una relación de este tipo, es muy común volverse una persona complaciente para agradar a los demás y “no tener problemas”. Esto también está directamente relacionado con una falta de autoestima y un sentido de ser insuficiente siendo uno mismo, con lo que se vuelve un mecanismo compensatorio.

El defecto fatal

Una relación de abuso narcisista suele dejarte con un sentimiento de insuficiencia e inadecuación, como si tuvieras un defecto fatal que te impide “ser normal”. Debajo de este sentimiento suele haber una profunda vergüenza y culpa y la sensación de que no eres merecedora de tener una vida sana, satisfactoria y plena.

Auto-sabotaje

Derivado del apartado anterior, suelen ser frecuentes los comportamientos de auto-sabotaje, tanto en las relaciones, como en el ámbito laboral. El sentimiento de no merecer te puede llevar a tener comportamientos en los que te pones las cosas difíciles, como dejar a una pareja porque no confías en ella cuando en realidad no te ha dado señales para ello o no ir a esa entrevista para un trabajo que te interesa mucho.

Adicciones

A consecuencia de todo lo mencionado, es frecuente tener comportamientos adictivos, tanto con sustancias, como el alcohol, el tabaco o drogas duras, como de comportamiento, como a las compras, el sexo o el trabajo. Estas adicciones suelen ser una forma inconsciente de huir, para escapar de contactar con el dolor emocional, la vergüenza o la culpa. También para compensar estados de ánimo muy bajos.

Recuperación del abuso narcisista

Las secuelas de las relaciones de abuso narcisista suelen ser profundas y de larga duración. Sin embargo, hay esperanza. No es necesario tomárselo como una condena y como algo que va a estar ahí para siempre.

Más abajo te doy una lista de técnicas y conductas que puedes empezar a abordar en tu camino a la sanación:

  1. Hacer yoga o pilates. Ambas prácticas ayudan a conectar contigo a nivel corporal y emocional. También contribuyen a una regulación del sistema nervioso.
  2. Meditar o practicar mindfulness te permitirá estar más en el momento presente y sentir calma y relajación.
  3. Hacer terapia con una terapeuta que sepa de narcisismo. La terapia Gestalt está recomendada por muchos expertos para este tipo de heridas y de relaciones abusivas.
  4. Buscar hobbies que te gusten y te hagan sentir bien, da igual si se trata de dar paseos, hacer macramé o jugar al ping-pong. Busca qué es lo que te gusta hacer y dedica un tiempo a la semana a hacerlo.
  5. Pasar tiempo con amistades y familiares de tu confianza. Es importante tener y mantener vínculos donde te sientas querida, escuchada y apoyada.
  6. Hacerte con una mascota. Cuando hay un tema con la confianza en los demás, una mascota puede convertirse en el primer vínculo donde te sientes cómoda y en confianza.
  7. Leer e informarte sobre narcisismo, ya que es un tema que no tiene tant difusión y su desconocimiento puede generar mucha confusión y dudas. Cuanto más sepas sobre narcisismo y relaciones con narcisistas, más luz pondrá a lo que has vivido
  8. Hacer actividades al aire libre, en contacto con la naturaleza. Esto te ayuda a conectar contigo misma y a estar en un entorno que facilita sentir paz y seguridad.
  9. Tomar duchas de agua fría y hacer respiraciones pranayama, que contribuyen a la regulación de tu sistema nervioso.
  10. Dedicar tiempo a estar contigo misma y a conocerte. Después del abuso narcisista, suele haber mucha confusión con lo que ha sucedido y con tu identidad, con quién eres. Empezar un diario, por ejemplo, puede ayudarte a empezar a conocerte mejor y es un paso importante para aumentar tu autoestima, ya que sólo podemos querer a quienes conocemos de una forma profunda.

Foto de Uday Mittal en Unsplash.

cierre abuso narcisista

Cómo hacer el cierre de una relación de Abuso Narcisista

En la mayoría de los casos, el abuso narcisista es perpetrado por un ser querido o cercano, lo que dificulta a la persona que está siendo abusada ser consciente del abuso. De forma muy general, se produce en las relaciones de pareja pero esto no es exclusivo, ya que también puede darse en relaciones familiares, con amigos o relaciones de trabajo.

Tipos de Abuso Narcisista en las Relaciones

Comúnmente, el abuso en general se asocia únicamente con el abuso físico, cuando en realidad hay otras forma de abuso que también son muy dañinas. Más abajo tienes una descripción de las principales:

  • Emocional: el tratamiento de silencio, hacer luz de gas o gaslighting, ignorar o despreciar tus emociones, cosificarte, pegar golpes a tu alrededor para asustarte,…
  • Físico: pegar golpes, patadas, coscorrones, pellizcar, empujar, zarandear, pisar,…
  • Verbal: poner apelativos degradantes, insultar,…
  • Sexual: infligir coerción para tener sexo, negarse a utilizar anti-conceptivos, utilizar el sexo para manipular o controlar,…
  • Espiritual: burlarse de tus creencias espirituales o no tenerlas en cuenta, utilizar tu espiritualidad para manipularte,…
  • Financiero: limitar tu acceso a los recursos, tomar decisiones unilaterales sobre los recursos compartidos,…
  • Digital: exigencia de contraseñas o acceso a tus dispositivos digitales sin tu permiso,…
  • Laboral: no apoyar tu carrera profesional, sabotear o no reconocer tus logros laborales,…

Es importante que, si tienes dudas acerca de si estás en una relación de abuso narcisista, te des cuenta a qué tipo de abuso estás siendo sometida con o sin tu consentimiento.

Secuelas muy frecuentes al finalizar una relación de Abuso Narcisista

Cuando has finalizado una relación de abuso narcisista, es común experimentar algunas (o incluso todas) de las siguientes secuelas:

  • Disonancia cognitiva: donde todo lo invertido en la relación, puede empujarte a querer volver a ella a través de una manipulación a ti misma.
  • Sentirte solo o aislado: sobre todo si no cuentas con una persona o personas de confianza que entiendan y te apoyen sobre lo ocurrido.
  • Sentirte insegura o incapaz de tomar decisiones por ti misma.
  • Síntomas de ansiedad o depresión.
  • Hipervigilancia.
  • Pensamientos paranoicos.
  • Síntomas del Síndrome de Estrés Post-Traumático Complejo, que puede incluir miedo a estar sola, tener flashbacks emocionales, experimentar muchos detonantes, no sentirte segura en tu propio cuerpo, tener la sensación de estar en peligro todo el tiempo,…

Qué es el cierre de una relación de abuso narcisista

El cierre se refiere a tener un sentido de comprensión, paz y finalidad aceptada de la relación, ya sea que haya terminado debido a la pérdida, el rechazo o el distanciamiento.

Todas las personas experimentamos pérdidas en las relaciones a lo largo de la vida, y algunos cierres son más complejos, dolorosos o confusos que otros. En el caso de las relaciones de abuso narcisista no suele ser fácil. No sólo por las secuelas más arriba comentadas sino también porque el/la narcisista no suele facilitar el cierre, donde si ambas personas colaboran, el cierre es más llevadero.

Esto significa que si estás haciendo el cierre de una relación de abuso narcisista, ya se sea de pareja, de un familiar, amigo, jefe,… es muy probable que tengas que hacerlo sin la colaboración del narcisista, que se negará a hacerlo, podrá excusas, desaparecerá,… Por ello, es muy posible que tengas dificultades para hacer un cierre real de tu relación de abuso narcisista.

5 Señales de que no has hecho el cierre de tu relación de Abuso Narcisista

A veces luchamos por soltarnos por completo y el final natural de la relación se prolonga durante meses o incluso años. Otras veces, el final ha sido tan abrupto que luchamos por darle sentido a lo que sucedió o aceptar que la relación ha terminado. En otros casos, albergamos intensos sentimientos de culpa, vergüenza, confusión o dolor que son difíciles de superar.

Rumiación: no puedes dejar de pensar en la relación

Rumiar y obsesionarse con la narcisista y lo que sucedió son señales claras de que aún no has encontrado el cierre. Todavía hay un enredo energético, mental o emocionalmente con la narcisista.

Esto puede presentarse en forma de tener pensamientos intrusivos, tener dificultades para dormir o completar las tareas diarias o revisar continuaente sus redes sociales.

No puedes entender lo que pasó

Comprender por qué la relación ha terminado de la manera que lo ha heccho trae una sensación de paz interna. Si te cuesta entender cómo terminaron las cosas, esto puede atormentarte y hacerte sentir que el capítulo aún no se ha cerrado. Esto es muy habitual en las relaciones de abuso narcisista, ya que el cierre suele ser abrupto, sin explicaciones, caótico o directamente un ghosting. Esto dificulta mucho que puedas entender qué es lo que ha ocurrido realmente y porqué se ha tomado la decisión de que la relación termine.

Tienes dificultades para soltar al narcisista

La dificultad para soltar al narcisista y experimentar las emociones asociadas a un cierre como de dolor, angustia, vacío, vergüenza,… puede llevarte a la auto-trampa de intentar mantener a la persona en calidad de, por ejemplo, amigo. Esto es algo que no suele funcionar y que sólo dificulta el cierre y poder estar disponible para una nueva relación.

Confundes lo que ha pasado en la relación con tu valor como persona

Cuando termina una relación importante, es natural experimentar dolor y tristeza. Esto es universal y parte de la experiencia de vida de todas las personas. Sin embargo, si a través de acusaciones de tu ex narcisista, como “No eres suficiente” o pensamientos propios tuyos como “No soy digna de amor” pueden prolongar el proceso de duelo y trasladarse como un pesado bagaje emocional de una relación a otra.

Te estás aferrando a la rabia o al resentimiento

Si las cosas terminaron mal o abruptamente, podrías tener una profunda sensación de rabia, frustración o resentimiento. Si estos sentimientos persisten mucho, es posible que te estés aferrando a ellos porque inconscientemente, te parecen mejores o estás más acostumbrado a ellos que a emociones como el dolor a la tristeza. Esto, a la larga, es muy perjudicial para ti porque estás arrastrando emociones intensas durante demasiado tiempo y porque para que haya un cierre real es necesario sentir tristeza y dolor. No son agradables pero se terminan pasando y, después de esto, estarás emocionalmente disponible para tu siguiente relación.

Cómo conseguir el cierre de una relación de abuso narcisista

Sentir que no hay un cierre puede causar angustia y malestar y dificultar que puedas estar disponible emocionalmente para tu próxima relación u otras partes de tu vida. Aquí hay algunas maneras en las que puedes soltar, recuperarte y seguir adelante.

Deja de buscar el permiso de la narcisista para dejar la relación

Para muchos de nosotros es un acto radical abandonar una relación, especialmente cuando tenemos que hacerlo sin que la otra persona haga lo mismo. Es importante dejar de intentar que la narcisista te ‘de’ esto sino que te lo des tú a ti misma. Esto por sí solo te liberará de inmediato, y es muy fortalecedor.

Observa tu relación como si no fueras una parte integrante de ella

Esto te permitirá verte más objetivamente a ti misma y a tu pareja y quizás dejar de hacer eso de “pedirle peras al olmo”. Cómo una persona ha estado en una relación es un indicativo importante de cómo la va a dejar. Si el narcisista no ha estado disponible emocionalmente durante la relación, no lo va a estar para cerrarla. Esto puede ayudarte a soltar un cierre ideal y aplicar por ti misma un cierre más realista.

Acepta y gestiona un periodo de “síndrome de abstinencia”

En las relaciones de abuso narcisista suele haber una subida y bajada de hormonas como cortisol, adrenalina, endorfinas y dopamina muy constante y abrupta que termina siendo adictiva. Cuando una relación de este tipo termina, es normal tener un síndrome de abstinencia a estas subidas y bajadas de hormonas. Saber y aceptar que eso es lo que ocurre en tu cerebro y tu cuerpo, puede ayudarte a pasarlo de la mejor manera posible.

Construye una red de apoyo para atravesar el cierre

Si bien hay poder en navegar las cosas por tu cuenta, apoyarte en la ayuda de otros es una señal de fortaleza. Comunícate con amigos y familiares en los que confías y apóyate en ellos para poder sobrellevar el cierre de la relación de abuso narcisista de la mejor manera posible.

Busca una terapeuta experta en narcisismo que te acompañe en el cierre

El cierre es complejo y no es una línea recta. No hay un camino establecido que te lleve a la línea de meta, y es posible que te encuentres con momentos de ir hacia adelante y hacia atrás. Tener una terapeuta que te acompañe en este camino, te puede ayudar a gestionar tus emociones, elaborar lo que tengas pendiente y facilitarte darle, por fin, un cierre digno a tu relación de abuso narcisista.

Imagen de Radu Florin en Unsplash

abuso narcisista

Abuso Narcisista: cómo evitarlo o sanarlo

El abuso narcisista es un tema todavía bastante desconocido a nivel social en general. Casi todo el mundo está familiarizado con el abuso físico: la persona que golpea a su pareja. Pero el abuso emocional y el abuso psicológico también son componentes integrales del abuso, muy frecuentes y más difíciles de detectar poque no dejan secuelas físicas (a menos que se acabe desarrollando una enfermedad, como el cáncer, a causa del abuso y que en la mayoría de los casos la víctima no la relaciona), por ello se le llama el abuso invisible.

A menudo, las personas que abusan de otras tienen algún tipo de trastorno de la personalidad que aumenta sus posibilidades de convertirse en abusadoras. Muchos de estos trastornos de la personalidad tienen raíces en el narcisismo, un mecanismo de defensa psicológica en el que la persona alberga fantasías grandiosas sobre sí misma y se siente egoístamente con derecho a que se satisfagan todas sus demandas.

Las narcisistas requieren un flujo constante de admiración, o “suministro narcisista”, en su vida. Logran esto a través del encanto, la manipulación emocional y psicológica, y todo tipo de tácticas y comportamientos oscuros o muy poco éticos. Cuando un(a) narcisista quiere algo de ti, o quiere que hagas algo, se aprovechará de tu buena voluntad para sus propios fines sin pensarlo dos veces.

Perfil de las personas Víctimas de Abuso Narcisista

Si crees que podrías ser o ya has sido víctma de abuso narcisista, hay una serie de factores a tener en cuenta que te pueden ayudar a verlo más claro:

Tienes una carencia emocional

Esa carencia emocional que tienes, y de la que el narcisista se ha dado cuenta y cubre al principo de la relación, comenzará a retirarla con el tiempo. Esta carencia puede ser falta la de autoestima, necesidad de validación o de reconocimiento, tener inseguridades, pensar que “no eres suficiente”,… La mayoría de ellas, las arrastramos desde la infancia porque fueron necesidades no cubiertas por nuestros cuidadores primarios.

Eres muy ingenuo para la media de los seres humanos

Si tiendes a ser inocente o te crees fácilmente lo que te cuentan sin discriminar, es mucho más fácil que una narcisista te enrede. ¿Sabes esa frase de que si algo es demasiado bueno para ser verdad, es que no lo es? ¡Pues es cierta! Normalmente, un narcisista se presenta con una fachada encantadora y carismática prometiendo cosas de forma directa o indirecta que son bastante inverosímiles en un contexto realista.

Estás en un momento vital de mucha vulnerabilidad

Ese momento vital de mucha vulnerabilidad es cuando se da el primer encuentro con la narcisista. Este momento de mucha vulnerabilidad puede consistir en una ruptura de pareja reciente, el duelo por la muerte de un ser querido, estar en un lugar nuevo donde no conoces a nadie, acabar de ser despedido de un trabajo,… Este momento es aprovechado por la narcisista para introducirse en tu vida de forma fácil y a mucha velocidad. Fingirá que está ahí para ti y para hacerte sentir que puedes confiar en ella.

El proceso de preparación por el Narcisista

El abuso narcisista no se da forma casual ni de un día para otro. El proceso de preparación implica un sondeo progresivo de los límites de la víctima, mientras que al mismo tiempo se desarrolla una base de confianza. Es le receta perfecta para un desequilibrio de poder. El propósito principal de la preparación es normalizar el comportamiento inapropiado.

El narsisista expresarán exactamente las mismas emociones que su víctima, sintiéndose ésta agradecida de haber conocido finalmente a alguien que sabe cómo se siente. No importan los detalles (que a menudo son confusos), es alentador para ella darse cuenta de que alguien puede identificarse con ella. Esto es algo que el narcisista consigue hacer, en el caso de relaciones de pareja, a través del mirroring. Simplemente se trata de imitar a la otra persona, al punto de que se vea reflejada como en un espejo, con pensamientos del tipo “por fin he encontrado a mi alma gemela”, cuando en realidad el narcisista se está adaptando a lo que se da cuenta de que la víctima quiere oír.

Todo es en realidad una farsa, se trata de una interpretación perfecta para que la víctima se confíe, sienta que el narcisosta es una persona que merece la pena y generar dependencia emocional. Es una fase de preparación del terreno para que después el narcisista pueda cubrir sus necesidades de una forma abusiva sin que lo parezca. Esta fase, en el caso de las relaciones de pareja, se conoce como bombardeo de amor o love bombing.

Además, parecerá que el narcisista te abre su corazón muy rápido, contando muy cosas personales sobre sí mismo. Esto es algo preparado, su intención es que creas que se está generando intimidad entre vosotros y hagas lo mismo. Más tarde, toda la información que le proporciones, será utilizada para manipularte.

Pautas para sanar el Abuso Narcisista

Si ya has tenido una experiencia de abuso emocional o pisocológico, aquí tienes algunas claves para recuperate de ella. Recuerda que si tú cambias, todo a tu alrededor cambia también. Si no das los pasos para cambiar internamente, aunque termines con esa relación, es muy probable que vuelvas a encontrarte con una persona similar a la anterior en la siguiete relación, una y otra vez, porque harás un “match” energético con ella.

  1. Sé realista acerca de la naturaleza humana. Abandona la creencia ingenua de que, debido a que generalmente eres buena, todos los demás son básicamente iguales. Date cuenta de si cuando te dices que estás siendo buena, en realidad estás siendo sumisa.
  2. Aprende a observar a los demás con una cierta objetividad y distancia. Deja de creerte lo que te dicen al pie de la letra y observa a las personas desde un lugar de más neutralidad. La coherencia es fundamental. Date cuenta de si hay coherencia entre lo que la persona dice y hace, porque si no es así, es muy probable que sea una narcisista.
  3. Si has crecido en una familia en la que había una o más personas narcisistas, psicópatas o sociópatas, es muy posible que hayas normalizado comportamientos disfuncionales como normales. Informarte sobre qué es el narcisismo, la psicopatía y/o la sociopatía es importante para comprender los patrones y comportamientos de estas personas.
  4. Conócete mejor de lo que te conoce el narcsista. Si no te conoces mucho a ti misma, hay más probabilidades de que otras personas te manipulen. Dedica tiempo a conocerte a ti misma.
  5. Responde estratégicamente, no reacciones emocionalmente. Las reacciones emocionales te dejan a merced de lo que haga la narcisista y te hacen perder poder y autonomía personales. Aprende a responder (tomando pausas para respirar) en lugar de a reaccionar a los comportamientos del narcisista.
  6. Amplía y cultiva tu red de personas seguras. Las narcisistas tienen éxito, entre otras cosas, porque aíslan progresivamente a sus víctimas. Una persona que está sola y no puede apoyarse en otras es mucho más susceptible de ser manipulada, utilizada, explotada, engañada,…
  7. Practica la gratitud en tu vida. Una actitud de gratitud, llama a la abundancia en lugar de a la carencia, que es el estado que el narcisista buscará en el que estés y, si lo consigue, después explotará.
  8. Date cuenta de si confundes la intimidad con la intensidad en las relaciones. Muchas personas que terminan en relaciones con narcisistas, se vuelven adictas a las subidas y bajadas emocionales en la relación, debido a la liberación muy intensa de hormonas como oxitocina y dopamina en las subidas y cortisol y adrenalina en las bajadas. Una relación de ese tipo es intensa pero no segura. En una relación segura, sientes que puedes abrirte, ser tú misma, ser escuchada, ser vulnerable con la otra persona. Hay una seguridad que hace que no porque haya un conflicto, toda la relación se ponga en juego. Esto puede resultar aburrido si estás acostumbrada al sube y baja de algo inestable pero no es sostenible en el tiempo, y en última instancia, tus necesidades emocionales básicas no podrán ser cubiertas en una relación que funciona como una montaña rusa.
  9. Haz conscientes tus detonantes emocionales. Cuanto más consciente seas de cuáles son tus detonantes emocionales y aprendas a gestionarlos, será más difícil que la narcisista intente controlarte o manipularte a través de ellos. Ejemplos de detonantes emocionales son sentirte culpable por determinadas cosas, reaccionar ante frases como “Estás gorda”, “Eres muy sensible” o “Estás loca”.
  10. Aumenta tu autoestima. Esto puedes hacerlo con comportamientos como no ignorar tus fuerzas, aceptar cumplidos de otras personas, cuidarte con pequeños gestos, abrazar tus cualidades y tus defectos, dejar de exigirte tanto, ser más compasiva contigo misma, cuidar las relaciones en tu vida que te importan, poner límites, defenderte si es necesario, expresar tus opiniones y criterios, ser proactiva para conseguir lo que quieres.
  11. Recupera tu poder personal no dejando que el narcisista te controle, te diga lo que tienes que hacer, te defina, te agreda, quiebre tus límites o te trate como si fueras inferior a él.
  12. Date cuenta de cuál es la dependencia emocional que tienes hacia la narcisista y practica para darte eso a ti misma: amor, atención, validación, apoyo,…

Superar el abuso narcisista es una tarea que puede resultar difícil de hacer en soledad. Es recomendable que busques la ayuda profesional de una terapeuta que sepa sobre narcisismo y te pueda acompañar en tu proceso personal de sanación.

Imagen de William Farlow en Unsplash

abuso narcisista

Señales de que estás sufriendo Abuso Narcisista

Sobrevivir al abuso narcisista requiere involucrarse en una autosanación activa, y eso a menudo comienza con mirar hacia dentro, a nosotros mismos y nuestras emociones.

Si te armas de voluntad y proteges el bienestar y las necesidades que te pertenecen por derecho, puedes encontrar el camino de regreso a la libertad. Sin embargo, es un proceso que requiere que profundices y veas el panorama más amplio que te espera al otro lado de este camino.

El Abuso Narcisista no es un Mito sino una Realidad

El abuso narcisista siempre incluye manipulación y control y puede ser lento e insidioso, destruyendo tu sentido de identidad antes de que te des cuenta de lo realmente está sucediendo.

Cuando te conviertes en víctima de abuso narcisista, pierdes completamente el sentido de tu valor y la importancia de tus necesidades y sueños. Dejas caer tus límites y cedes el control a otra persona, y con eso entregas partes de tu personalidad y tu libertad.

El abuso narcisista se refiere a los comportamientos que usan los narcisistas en sus relaciones con otras personas. Estos comportamientos erosionan la autoestima de estas personas e incluso pueden cambiar drásticamente su personalidad. Es una forma tóxica de vivir y tiene efectos duraderos para las víctimas involucradas.

El abuso narcisista ocurre a través del abuso verbal y psicológico, la manipulación emocional e incluso campañas de miedo, amenazas y terror. Un narcisista es incapaz de ver el valor inherente en nadie más, porque sólo puede ver sus propias necesidades, deseos y perspectivas.

Liberarse de ellos es sólo el primer paso en la sanación. Para prosperar por completo tras el abuso narcisista, has de entender cómo te ha afectado este abuso y luego trabajar para cambiarlo a través del amor propio y la compasión.

Las Señales reveladoras de Abuso Narcisista

Cuando eres víctima de abuso narcisista, hay una serie de señales reveladoras que pueden ayudarte a advertirlo y ayudarte a protegerte.

No tienes que aceptar el maltrato y el mal comportamiento de la narcisista en tu vida, puedes encontrar la libertad y la felicidad de nuevo, pero es necesario aprender a detectar las señales de que te están despreciando y pisoteando.

Caminando sobre cáscaras de huevo

Cuando construyes una vida con una narcisista, estás construyendo una vida sobre arenas movedizas. Las narcisistas utilizan las emociones para manipular los sentimientos y comportamientos de quienes les rodean.

Si manifiestas tus vulnerabilidades o conoces a la narcisista en un momento de tu vida en el que estás especialmente frágil (porque te has ido a vivir a un sitio nuevo, estás buscando trabajo, acabas de terminar una relación importante para ti,…) la narcisista aprovechará toda la información que le des sobre ti para después manipularte en un juego de poder. Sabrá lo que te hace daño y tus puntos débiles y eso es lo que explotará después en la relación.

La narcisista aprovechará toda la información que le des sobre ti para después manipularte en un juego de poder. Sabrá lo que te hace daño y tus puntos débiles y eso es lo que explotará durante la relación.

Tener una relación con una narcisista significa caminar sobre cáscaras de huevo, en un estado permanente de hipervigilancia y evaluar constantemente tu forma de ser y tu comportamiento para evitar molestarle o alejarle.

Sentirás que no puedes ser tú mismo en la relación, que hay ciertos temas sobre los que no se te permite hablar y que si haces algo contraviniendo su voluntad, este comportamiento tendrá un castigo, tratándote como si fueras un niño en lugar de un adulto.

Gaslighting

La luz de gas es un término todavía poco conocido en España pero que poco a poco se está haciendo más popular. Es una forma de manipulación compleja y muy dañina para la víctima, ya que la hunde en mucha confusión y dudas sobre sí misma. Hace que la víctima se cuestione sus propias emociones, percepciones y cordura.

Ejemplos de gaslighting serían acusaciones directas del tipo “Tú estás loca” o afirmaciones más sutiles que lo que hacen es cuestionar tu sanidad mental, como “tú no estás bien”, “yo creo que necesitas ayuda”, “ya sabes que tienes demasiada imaginación”,.. El fin último del gaslighting es hacer completamente dependiente a la persona, haciéndola dudar de sí misma de aspectos tan básicos como su percepción de la realidad para que dependa por completo del abusador narcisista y así poder utilizarla, abusarla o explotarla de diferentes maneras.

Cero sentido de confianza

No puede haber verdadera confianza o estabilidad cuando se trata de abuso narcisista, porque la desestabilización es una de las tácticas centrales que los narcisistas usan para ponerse por encima en la relación.

El narcisista creará al principio un clima de confianza que en realidad es falso para después dinamitarla haciendo que pierdas la confianza en la relación y en ti misma y culpándote a ti de ello.

Utilizará la confianza que le das para después abusar de ella. Al final, por mucho que parezca que puedes confiar en esta persona, sentirás que no es así.

Dejando de lado tus necesidades

En el mundo de la narcisista, todo se trata de ella, y sólo sus necesidades son importantes. Uno de los signos característicos de que estás sufriendo abuso narcisista es un constante rechazo de tus necesidades.

La abusadora niega, minimiza y/o disminuye tus necesidades hasta el punto que tú comenzarás a hacer lo mismo. Poco a poco, en la relación sólo importarán las necesidades de la narcisista, tanto para ella como para ti y acabarás en modo “aguantar” la relación a la espera de que esto cambie o justificando este gran desequilibrio.

Al final, muchos codependientes desarrollan una rabia hacia el narcisista de la que no son conscientes por tener que anular sus propias necesidades por el bien de la relación.

Un mundo marchito y reducido

¿Has notado que tu mundo se está encogiendo? ¿Tus círculos sociales u oportunidades profesionales se hacen cada vez más pequeños como consecuencia de tu relación?

Poco a poco, la narcisista irá reduciendo tu mundo, aislándote y haciéndote completamente dependiente de ella. Si estás en una relación así, los vínculos con tu familia, amigos y laborales se van haciendo cada vez más débiles y pobres.

Esto es porque a la narcisista en realidad no le importa tu bienestar ni que consigas lo que quieres en la vida, sino que, al contrario, lo que le interesa es controlarte y manipularte hasta el punto de que lo único que te importe sea tu relación con ella.

Siempre cargando con la culpa

Además de dejar de lado sus propias necesidades, las víctimas de abuso narcisista se sienten muy culpables cuando las cosas salen mal.

En el mundo del narcisista, él no puede equivocarse. Ya sea que cometa un error genuino o simplemente se enfrente a los desafíos naturales de la vida, le echa la culpa de todo lo que cree que no va bien a los demás. Por eso, las víctimas interiorizan esa culpa cargando con todo el peso de la relación y lo que ha ocurrido. El narcisista se niega a responsabilizarse de nada y tiende a acusar a la víctima de que si la relación no ha funcionado es por algo que ha hecho o que no ha hecho, que podría haberse esforzado más,..

Por lo general, la persona que está en la relación con un(a) narcisista ya tiene mucha culpa interiorizada de infancia, donde el padre o la madre la culpabilizaba de todo y utilizaba el tema de la culpa para manipularla.

Inestabilidad e inseguridad

La inestabilidad y la inseguridad son la clave del juego del abusador narcisista. Si sientes que nunca puedes obtener una respuesta directa de tu pareja, o te sientes constantemente fuera de lugar en presencia de esta persona, esto no es un error.

Los abusadores narcisistas usan esta inestabilidad de ida y vuelta para hacerte sentir inseguro. Cuanto más inseguro seas, más lo mirarás y llegarás a depender de sus manipulaciones emocionales como el único medio para ser feliz.

Sentirse Atrapada en la Relación

La última señal e inequívoca de que estás en una relación de abuso narcisista es el sentimiento de sentirte atrapada en la relación, como si alguien te estuviese reteniendo y fueses más un rehén que una parte voluntaria del vínculo.

Esto es, tú quieres salir de la relación, sabes que está erosionando tu autoestima, provocándote ansiedad,… y aún así, sientes impotencia, sin las fuerzas o la determinación para salir de ella, al punto de que lo que más te gustaría es que el narcisista terminase la relación para poder salir de ese lugar.

La última señal e inequívoca de que estás en una relación de abuso narcisista es el sentimiento de sentirte atrapada en la relación, como si alguien te estuviese reteniendo y fueses más un rehén que una parte voluntaria del vínculo.

Si estás en una relación así, pide ayuda.

Imagen de Noah Buscher en Unsplash

Fuente: https://medium.com

Cómo Sanar tras el Abuso Narcisista

Cómo Sanar tras el Abuso Narcisista

El tema de qué es el narcisismo, su dimensión como un trastorno mental y los efectos que tiene en la familia es algo que está adquiriendo cada vez más voz, a ser más conocido. Aunque está lejos de tener la difusión que necesita para prevenir y sanar a todas las familias narcisistas a las que afecta. El trabajo de recuperación interna es crucial. Una cosa es entender la dinámica. Saber que tu padre/madre tiene una enfermedad mental es una validación que te ayuda a saber que no es tu culpa. Pero el siguiente paso es tu propio trabajo interno.

Cómo Sanar del Abuso Narcisista

La psicoterapia para sanar el abuso narcisista tiene tres partes:

  1. Comprender los antecedentes, tu historia y el diagnóstico.
  2. Tratar los sentimientos relacionados con tu historia.
  3. Comenzar a ver la vida con una perspectiva diferente.

La filosofía del “Supéralo ya” no funciona para la recuperación que necesitas, ni tampoco las afirmaciones o un trabajo de terapia cognitivo-conductual. Esta recuperación del abuso narcisista por tu familia implica limpiar primero el trauma y aceptar que tus padres no van a cambiar. El cambio está dentro de ti.

La Dra. Elisabeth Kübler-Ross, famosa por su trabajo sobre el dolor y la muerte, considera que las etapas del duelo son cinco: negación, negociación, enfado, dolor y aceptación.

Etapas de la Recuperación después del Abuso Narcisista

Negación. Los hijos adultos de narcisistas ya han estado en fase de negación con respecto a sí mismos y a su padre/madre narcisista durante mucho tiempo. Esto porque la negación es uno de los mecanismos de defensa utilizados en la familia narcisista. Utilizando la negación, no se reconoce que haya un problema ni una disfuncionalidad, lo que permite continuar con las dinámicas tóxicas y los roles rígidos en la familia narcisista.

Negociación. Hemos estado negociando toda nuestra vida con el padre/madre narcisista, tanto internamente, con nosotros mismos, como con él/ella. Hemos estado deseando y esperando que cambien, que serán diferentes la próxima vez que los necesitemos. Hemos intentado muchas cosas a lo largo de los años para ganar su amor y aprobación.

Aceptación. Primero debemos aceptar la realidad dura de que nuestro padre/madre no tenía mucho amor y empatía para darnos, con lo que crecimos con muchas carencias afectivas y nos auto-culpabilizamos para darle sentido a una situación que, inconscientemente, sabíamos que no era sana ni nutritiva para una niña.

Rabia. Sentimos una rabia intensa y, a veces, ira cuando nos damos cuenta de que nuestras necesidades emocionales no fueron satisfechas y que esta negligencia ha afectado a nuestras vidas de manera severa y adversa. Nos enfadamos con el padre/madre narcisista y con nosotras mismas por permitir que se hayan desarrollado patrones de conducto tóxicos y autodestructivos y por estar estancadas en nuestras vidas.

Dolor. Sentimos una tristeza intensa por dejar de lado la esperanza de que el tipo de madre/padre que queríamos no lo teníamos y no lo tendremos nunca. Nos damos cuenta de que nunca serán tan amorosos como queremos que sean porque tampoco tienen amor para sí mismos. Nos sentimos como huérfanos. Soltamos todas las expectativas y las fantasías de lo que no va a ser. Lloramos una pérdida de algo que no hemos tenido nunca.

Durante el proceso de duelo, irás hacia adelante y hacia atrás en todas las etapas. No es fácil y no es un camino con una línea recta. Habrá días que tengas mucha rabia difícil de gestionar y otros días en los que el dolor de toda la pérdida te abrumará. Persevera. Si te comprometes contigo mismo y te acompañas a lo largo de todo el proceso, verás que, poco a poco, te conviertes en tu Verdadero Yo, en la persona que estabas destinada a ser a pesar de tener unos comienzos tan difíciles en la vida.

Es más que probable que durante algunos momentos te asalte la culpa. No sólo porque en tu familia narcisista se te culpaba de más de cosas que te correspondían sino porque el tema de separarte emocionalmente de tus padres e identificarlos como abusadores puede ser controvertido, ya que poner en cuestión a la familia de origen o nombrarla por lo que es, sigue representando un tabú social.

Recuerda que no se trata de que critiques duramente a tus padres, igual que lo hicieron ellos contigo. Sino de que les pongas límites y les digas que no cuando lo necesites (lo que no te permitieron hacer cuando eras niña), que trates con ellos de adulto a adulto (no desde tu niño interior herido, que es lo que hacen ellos) y de que tengas compasión hacia ellos, ya que también han sufrido un trauma y abuso/abandono por sus padres y han repetido esto de forma inconsciente. El trauma es algo que se pasa de generación en generación hasta que no se sana en terapia.

No es lo mismo la tristeza soterrada que has tenido toda tu vida que abrazar realmente la aceptación permitiendo que el dolor por fin salga, sin estar atascado dentro de ti. Ése es un dolor que te sana. Estarás limpiando el trauma.

Esto no quiere decir que no quedarán cicatrices o que superarás totalmente el trauma infantil. Tu niño interior fue muy herido, por lo que tendrás que cuidarlo tú el resto de tu vida. Te quedarán cicatrices emocionales porque la herida ha sido grande, pero esa herida ya no supurará, podrás cerrarla y con ella dejar atrás de verdad tu pasado, sin repetir situaciones en tu presente que son recreaciones de tu trauma de infancia.

A medida que trabajes en tu recuperación después del abuso narcisista, te sentirás mejor, comprobarás cómo crece tu poder personal y tus recursos para afrontar cualesquiera situaciones que la vida te ponga delante. Dejarás de sentir impotencia e indefensión aprendida y empezarás a experimentar que tienes voz y poder sobre tu propia vida, que te conoces más y que tienes más instinto e intuición para detectar lo que es bueno para ti y para satisfacerte tus necesidades.

A medida que absorbes las pérdidas y el dolor y pasas el duelo, sentirás que es como si te derritieses. Estarás disolviendo resistencias, posturas defensivas y la rigidez. Todas ellas te han servido para sobrevivir, lo cual es estupendo. Pero a medida que las desmontes, dejarás de sobrevivir para vivir de verdad, prosperar.

Recuerda que la sanación se trata de ti. No se trata de lo que estás haciendo con tus padres narcisistas. Cada día te volverás un poco más grande. Paso a paso. Con paciencia. Es importante que encuentres dentro de ti la esperanza que te arrebataron. Está ahí, créeme. Sólo tienes que darte espacio y escucharte.

“Podemos ser redimidos sólo en la medida en que nos vemos a nosotros mismos”. Martin Buber.

Recuerda que todo este proceso de sanación tras el abuso narcisista tendrás que hacerlo con el apoyo de una psicoterapeuta especializada en narcisismo y trauma. Del mismo modo que las heridas fueron generadas por personas que no tenían mucho amor y conexión consigo mismas, las sanas con el apoyo de una persona que completa ese proceso: el del mirroring que tus padres narcisistas no pudieron darte para que te veas a ti mismo de verdad, la validación de tus sentimientos y emociones y un acompañamiento amoroso y de compasión.

fases del ciclo de abuso narcisista

El Ciclo de Abuso Narcisista en las Relaciones

Todas las relaciones humanas pasan por fases. En las relaciones con personas narcisistas estas fases suelen ser más marcadas y extremas. Éstas son la fase de idealización, la fase de devaluación y la fase de descarte. Veamos cada una de ellas.

Fase de Idealización: cuando comienza la relación entre narcisista y víctima.

Normalmente, el comienzo de una relación con una persona narcisista se da en un momento de vulnerabilidad de la víctima, que se encuentra en situaciones como la del duelo por la muerte de un ser querido o de una relación importante, acaba de perder su trabajo, acaba de llegar a una ciudad nueva y no conoce a nadie, etc. Esa vulnerabilidad es rápidamente detectada y explotada por la persona narcisista, que exhibe los comportamientos que se describen más abajo para engancharla y volverla dependiente de ella.

  • Bombardeo de amor o Love bombing: La persona narcisista llena de atención a la víctima, abre contacto con ella cada día y éste se prolonga durante horas. Le llena de halagos y de atenciones, parece como su de repente y casi de la nada y sin conocerse mucho, la conexión fuese enorme e imparable.
  • Prisa hacia la intimidad: La persona narcisista contará a la víctima cosas muy personales sobre ella y su vida muy rápidamente. Demasiado. En fases en las que la gente de lo que habla es de gustos y aficiones, la narcisista hablará de cosas muy íntimas (su divorcio, un suceso traumático de la infancia, la relación con su madre,…). La víctima tendrá la sensación de que hay mucha intimidad y confianza.
  • Escucha/ofrecimiento de apoyo personal: Escuchará a la víctima con mucha atención, está disponibles para ella en todo momento, para apoyarla en todo lo que necesite. ¿La víctima se ha peleado con un(a) amiga? Le dará su sabio consejo. ¿Ha tenido un mal día en el trabajo? Le dará su hombro para que llore si lo necesita. Será el foco de la atención de su vida durante un periodo de tiempo, normalmente corto.
  • Hacer de “espejo” (mirroring) de forma falsa: Hará de tsu “espejo” para que parezca que son almas gemelas. Si a la víctima le gusta la equitación, resulta que la narcisista hace tiempo que la quiere proba; si es una persona romántica, preparará una escena para ti a lo “Memorias de África”; si tu sueño siempre ha sido viajar a Perú y ver el Machu Picchu, ¡qué casualidad! El de la narcisista es justo ése.
  • Hiper-sexualidad: La narcisista querrá saber qué le gusta a la víctima en la cama, lo que hace que tenga orgasmos, desplegará una enorme creatividad y riqueza en este ámbito. El sexo se vuelve un gancho enorme en una relación y después de esta fase lo utilizará para controlar y dominar a la víctima.

Fase de devaluación: puede ocurrir de forma abierta frente a la víctima o de forma encubierta, a sus espaldas.

Si ocurre a sus espaldas, para la víctima no ocurrirá nada malo en su relación hasta ser descartada.

  • Andar sobre ascuas: La víctima se sentirá que tiene que andar sobre ascuas con todo lo que dice o hace, como si a la mínima fuese posible accionar un botón que despertase la ira, el desprecio, el rechazo,… de la narcisista. La relación se ha vuelto literalmente un campo minado para la víctima.
  • Rachas de ira narcisista, que puede incluir o no varios tipos de abuso: verbal, físico, emocional, psicológico, sexual, espiritual, financiero,..
  • Engañar a la víctima con terceras personas (triangulación): Esto normalmente ocurre durante todas las fases de la relación, pero es en esta fase cuando la narcisista lo deja ver de una forma más obvia: mensajes en Facebook a otras personas, esconde el teléfono, se supone que va a quedar con amigos pero luego resulta que se encontró con su ex y fue a tomar algo con él/ella.
  • Mentiras patológicas: Las mentiras pueden ir desde algo inocente y absurdo como mentir sobre que tenía un perro como mascota en la infancia que en realidad no existe o hablar de ese año que pasó de Erasmus en Italia. La víctima acaba descubriendo que nunca ha vivido en Italia.
  • Modo de vida parasitario: la narcisista empieza a aprovecharse financieramente de la víctima (esto con independencia de que se dé la situación de que la narcisista gane cinco veces más que la víctima), a que pague más que ella en los gastos de la casa, casualmente su tarjeta se queda sin fondos constantemente, pierde su trabajo y no parece tener mucha prisa por encontrar otro.
  • Luz de Gas (Gaslighting): La narcisista utiliza pequeñas tácticas para hacer que la víctima dude de sí misma, frases del estilo de “A veces nuetros amigos piensan que eres muy infantil”, “No, las llaves no las dejaste ahí, creo que a veces se te va la cabeza”, “Te pones histérica, creo que eres bipolar”.

La víctima empieza a cuestionar su comportamiento y a sí misma: ¿es él/ella o soy yo? ¿Tengo un problema? ¿Soy exagerada/dramático/histérica?

Fase de descarte en el ciclo de abuso narcisista

La persona narcisista deja la relación de una forma abrupta, sin cerrar de forma clara la relación y sin ningún tipo de tacto o empatía hacia la víctima, que se queda muy confusa y con mucho dolor.

  • Botón de “on/off “en la relación: La persona narcisista dejará a la víctima de un día para otro, sin avisar y dejando a la víctima muy sorprendida y desconcertada. Es como si la narcisita en lugar de emociones normales tuviese un botón de encendido y apagado con respecto a la relación y a la víctima (Te quiero vs No existes).
  • Tratamiento de silencio: es una forma de abuso psicológico mediante la cual la narcisista cierra toda forma de comunicación con la víctima. Si no lo ha hecho ya antes en la fase de devaluación (muy probable), lo hará en ésta, para acrecentar en la víctima las ganas de que la narcisista en algún momento vuelva a contactar en el futuro.
  • Ausencia de cierre: con una persona narcisista no suele haber un cierre concreto porque no lo permite. Si deja la relación, lo hará sin explicaciones, ni despedidas, ni un cierre digno y que honre la relación. Más adelante (meses, a veces años después) es muy probable que intente contactar de nuevo con la víctima mediante hoovering (técnica con la que intenta que retomar el contacto) para tantear si la víctima puedes volver a ser un posible objetivo.
  • La máscara de la persona narcisista se cae: en este fase, la narcisista deja ver su verdadera personalidad y suele mostrar una enorme falta de empatía y de remordimientos. Es frecuente que de un día para otro suba fotos a las redes sociales con su nueva pareja, explicando a los cuatro vientos lo felices que son y lo enamoradas que están, como si la relación con la víctima no hubiese existido nunca.

Por supuesto, también es posible que sea la víctima la que deje a la narcisista. En este caso, la narcisista es probable que primero intente que la ruptura no se produzca con todo tipo de mentiras, manipulaciones y estrategias. Si ésta se produce igualmente, desparecerá aplicando el tratamiento de silencio. Las posibilidades son muy altas de que vuelva a aparecer tras semanas, meses o incluso años sin contacto, intentando que la víctima o bien retome la relación o bien se vuelva una fuente secundaria de suplemento narcisista.

Si has conseguido alejar a la persona narcisista de tu vida, es aconsejable mantener el “contacto cero”. Si esto no es posible, puedes utilizar técnica de la “piedra gris”. Cuanto más tiempo está una persona narcisista en tu vida, más tardarás en que lo deje de estar, estas personas son muy difíciles de desenganchar de tu vida del todo porque son muy tenaces y persistentes y no aceptan un no ni un “se acabó” tan fácilmente. Cuanto más fuerte estés psicológica y emocionalmente, más fácil será empezar el “contacto cero” y mantenerlo.

Si estás involucrada en una relación donde hay abuso narcisista, es aconsejable buscar ayuda profesional de una terapeuta que sepa sobre abuso narcisista para salir de esta situación, trabajar en ti y tu autoestima y asegurarte de que esto no vuelva a suceder.

Imagen de Tine Ivanič en Unsplash.